A veces nos gustaría darle un aire nuevo a nuestro hogar pero no estamos para grandes gastos, una de las soluciones es darle un estilo diferente cambiando los colores de las estancias.
La pintura hará que se produzca un cambio de visión respecto a nuestra vivienda y, dependiendo de los colores que elijamos, se podrá incluso conseguir aportar nuevas sensaciones puesto que todos sabemos que los colores influyen en nuestro estado de ánimo.
En Trisacor trabajamos en todo tipo de proyectos, desde rehabilitaciones de fachadas de comunidades de vecinos a pequeñas reformas del hogar, en todos los casos nos valemos de grandes profesionales que con su experiencia consiguen un trabajo rápido y de calidad. Hoy utilizaremos de sus conocimientos para que nos den una serie de consejos a la hora de pintar una vivienda. ¡Manos a la pintura!.
Organización
La planificación es fundamental en el momento de abordar cualquier tipo de proyecto, y, en el caso de pintar nuestra casa, también. Antes de abrir el bote de pintura y ponernos con el rodillo, deberíamos preparar todo el material que vayamos a necesitar: cinta de pintor, papel protector, masilla, espátula, rodillos, cubetas, etc. y, por supuesto, despejar la zona que vayamos a pintar. Cuanto más espacio tengamos para movernos y menos preocupados estemos por manchar alguno de los accesorios o complementos de la estancia, mejor.
Antes de comenzar a pintar se cubrirá todo aquello que no queramos pintar como zócalos, marcos, interruptores, además de proteger el suelo con papel para evitar las posibles manchas.
Preparar las paredes
Muchas veces las ganas de ver cómo queda el color que hemos elegido nos hace apresurarnos y pintar sin comprobar el estado de la pared y corregir sus desperfectos. Si queremos obtener un buen resultado, lo conveniente es que en el caso de que existan pequeños desperfectos (grietas, desconchones, agujeros…) se cubran con masilla y una vez que esté seca, lijar y limpiar la zona.
Si la pared está en mal estado deberá lijarse, limpiarla y darle una imprimación y masillar antes de comenzar a pintar.
¿Qué pintura elegir?
Entre los diferentes tipos de pintura que podéis encontrar tenéis:
- Antialérgicas, que evitan la proliferación de ácaros y hongos.
- Tixotrópicas, que son aquellas que por sus características tienen una gran capacidad de cubrir manchas de grasa, humo, óxido y humedad.
- Ecolabel, son aquellas pinturas ecológicas que contienen un bajísimo índice de partículas contaminantes.
- Lavables, si tienes pequeños en casa, lo mejor es utilizar pinturas a las que se les pueda pasar un paño húmedo para eliminar las manchas y que no perjudiquen la pintura.
- Si elegís pinturas sintéticas debéis saber que antes de pintar con ellas se debe aplicar primero una base a la pared.
- Las pinturas plásticas tienen la ventaja de secar muy rápido y de no producir casi olor. Suele ser la opción más extendida a la hora de pintar cualquier estancia y podéis encontrarla en tres tipos de acabados: brillante, satinada y mate.
Una vez que ya lo tienes todo listo, es el momento de sacar el pintor que llevas dentro y comenzar a dar un nuevo color a tu hogar.
Recuerda, que debes dejar pasar hasta seis horas si quieres dar una segunda capa de pintura y, no te olvides de quitar las cintas de pintor una vez que haya secado la pintura puesto que si las dejas mucho tiempo es posible que cuando vayas a quitarlas deje rastro de su cola o, incluso, se lleve un poco de pintura.
Pintar tu casa te ayudará a mejorar su aspecto y darle un aire nuevo pero, si no te apetece hacerlo por ti mismo, puedes contar con nuestro equipo de reformas en Murcia y Alicante y pedirles presupuesto sin compromiso.